Los chilenos votan para no reemplazar la constitución de la era Pinochet

Los chilenos rechazaron una nueva constitución propuesta por delegados conservadores que habría afectado leyes en áreas como el acceso al aborto, la capacidad de hacer huelga y los derechos indígenas.

La nueva carta habría reemplazado la carta existente escrita durante el régimen militar del general Agustín Pinochet.

En un referéndum celebrado el domingo, el proyecto fue rechazado por una mayoría del 56% de los votantes frente al 44%.

Los votantes ya habían rechazado un borrador progresista el año pasado.

Los esfuerzos para reemplazar la actual constitución de Chile, adoptada en 1980 bajo la dictadura de Pinochet, comenzaron en 2019 después de manifestaciones antigubernamentales.

Los manifestantes, muchos de ellos estudiantes de izquierda, pidieron medidas para abordar la desigualdad y la crisis del costo de vida, así como reformas sociales y políticas.

Después de semanas de disturbios, el entonces presidente conservador, Sebastián Piñera, acordó lanzar un proceso para reescribir la constitución de Chile.

El primer borrador, escrito por un cuerpo de 155 miembros electos, proponía reformas al Senado de Chile, así como el reconocimiento formal de los grupos indígenas del país, pero fue rechazado por el 62% de los votantes en septiembre del año pasado.

La versión votada en el referéndum del domingo fue redactada por un nuevo cuerpo de 51 representantes electos, 23 de los cuales eran del derechista Partido Republicano.

Entre las críticas formuladas por los opositores de izquierda está que no protegió los derechos de los pueblos indígenas y podría haber permitido restricciones a los derechos reproductivos y consagrado la participación del sector privado en la prestación de servicios como salud, educación y pensiones.

El presidente chileno Gabriel Boric, que apoyó el primer borrador pero se mantuvo neutral sobre el segundo, dijo antes de la votación que sería el último intento de reforma constitucional.

Repitió su mensaje el domingo, diciendo: «Con esto… el proceso constitucional está cerrado. Hay otros asuntos urgentes».

“Nuestro país seguirá con la constitución actual, porque después de dos referendos sobre las constituciones propuestas, ninguna ha podido representar ni unir a Chile en su hermosa diversidad”.